La cacofonía es una secuencia de sonidos desagradables o de articulación difícil. Sé que las personas que sufren no deben de seguir haciéndolo ya que su dolor para aquel que consuela y no esta preparado puede resultar una cacofonía.
Hace mucho tiempo, supe que debía de aprender a perdonar y hace tiempo supe cuales eran mís respuestas, pero nunca supe como dejar ir.
Y de esa manera hubiera sido una mejor vida, y un mejor Talanteo por la vida. La universidad y amigos tras haberlos ya sentido como una experiencia inolvidable hubieran sido aun mejor si hubiera aprendido a dejar ir.
Y es así como suscribo mi carta pidiéndome perdón, una terrible cacofonía debo de aceptarlo de algo que nunca deje ir, pero se convierte en mi talante numero 2.
Cacofonía del dolor
—Oye, soy tu
consciencia, disculpa el no haberte perdonado pero aún nos duele mucho, aún hoy
te digo que eres inconsecuente, pero no puedo dejarte pasar más cosas.
—Hola soy yo, sé que
eres mi consciencia y ahora que sé que existes, también quiero pedirte perdón.
Mi consciencia, sé cuándo te hice daño y te pido que soportes cada una de mis
palabras sin perderte. Porque recordaré cada momento, y te pediré perdón por
cada uno. No quise ser
inconsecuente, pero quiero que sepas que también nos duele como a ti, disculpa
por compartir el dolor mi voz interna.
—Está bien, pero no
te prometo perderme-perdernos.
—¿Es un precio que
tengo que pagar entonces?
—Así es.
—Me transportaré
hacia esos lugares y comenzaré:
- Perdón, porque nos duele desde el día que quisimos besarle y siempre
había un pero,
- Perdón porque nos duele desde el día que le conocimos y hablábamos todas
las tardes y solo éramos su amigo,
- Perdón porque nos duele desde el día que le declaramos nuestro amor aun
sabiendo que nada pasaría, porque nos duele el que se dieran cuenta.
- Perdón porque nos duele haberle esperado durante 2 años para poder decirle
nuevamente que le amábamos.
- Perdón porque nos duele haberle tenido escasos meses y haber disfrutado
de su compañía y perderle porque no tenía dinero para darle detalles
- Perdón porque nos duele que sus amigos le dijeran que no conveníamos porque
creímos, en nuestra percepción, que ella decía que no la valorábamos.
- Perdón porque nos duele que a veces le dedicaba poesías, y estas no eran
suficientes para causar una respuesta.
- Conciencia, perdóname porque nos duele haber estado allí y levantarle
de la tristeza en la que estaba sumida por la pérdida, a pesar que siempre éramos
rechazados.
- Perdóname porque nos duele haber estado para ella, y ser regañado por no
haber hecho las cosas bien. Por haber recibido la respuesta de “has las cosas
bien si no quieres haberlas hecho de por gusto”.
- Yo sé que nos duele haber resistido ese tiempo sintiendo la necesidad de
un beso y una caricia, perdóname.
- También sé que duele haber querido ser una mejor persona, al estar alejándose
de nosotros, perdóname.
- Perdón porque duele haberle escuchado decir que necesitaba todo aquello
que no podías darle cuando estábamos para ella y hacíamos tantas cosas que no
eran materiales.
- Te pido perdón, porque sé que duele ser corregido en tus detalles, y
haber escuchado que estos podrían haber sido mejores.
- Perdón porque duele haber sido comparado con una opción en una mesa con
muchas opciones.
- Perdón porque duele haberle esperado un San Valentín 2 horas y verle
llegar con otro chico con muchos regalos para ella y no tener nada a cambio.
- Perdón mi consciencia, porque duele haberle comprendido, haberle
perdonado y haberle dicho, mi consciencia, que no era su culpa y debíamos
entender su evolución personal hacia la superación de su dolor.
- Perdóname, te lo digo con pena, porque nos duele haber esperado hasta
que eso ocurriese, y siempre quererle a pesar que su amor no nos perteneciera
más.
- Yo sé que duele que jamás nos pidieron perdón, y que tu mi conciencia nunca
escuchaste decir “Lo siento”. Solo estabas ahí viendo a su persona fingiendo
que nada pasó. Perdóname mi consciencia, porque duele perdonar sin escuchar
antes un lo siento.
- Perdón porque duele haberte pedido olvidar, y que decidiera estar ahí
tratando de redimirnos, y por hacer que esas personas se redimieran.
- Perdóname porque duele estar tras las sombras, y porque nos duele casi perder
su vida. Y duele, no haber recibido en ese momento un abrazo, solo sentir que necesitábamos
guardar las apariencias y fingir que no pasó nada, solo porque esa persona así
lo quería.
- Yo sé que duele, ser un buen amigo. Perdóname mi conciencia, porque duele
que seamos considerados una mala persona, aburridos y alguien que está triste
sin ninguna razón cuando las hay muchas.
- Perdón porque duele estar feliz por personas que ni conocíamos, y que saben
lo que hay detrás de nuestra sonrisa. Por no comprender que existen seres que permiten
que el romance aflore.
- Yo sé mi consciencia que duele estar ahí todo el tiempo, duele que no
sepan todo lo que te hacen, duele que regresen a ti y sentir siempre que puedes
dar algo más cuando la realidad es que nada sería suficiente porque no lo
puedes realizar como quisieran.
- Perdón porque sé que dolerá más, el saber que al decirte esto lastimaré
a esas personas. Duele saberlo, que no somos el problema.
- Lo siento porque tras saber muchas cosas seguimos queriéndole. Y no no
nos queremos ir.
—Aún faltan más cosas por las cuales me debes una explicación.
—Lo siento, lo sé. Pero tú no estabas presente cuando todo esto ocurrió
¿Por qué no apareciste y me detuviste?
—Porque Yo soy tú y compartimos los mismos sueños, sin embargo yo te
digo que está bien o mal, pero tú estás sobre mí.
—pero he aprendido mucho
—Somos incompatibles, te sugiero que reconozcas al número 7 y este año
acaba el ciclo… el otro año sería un 8 y no podemos aceptar un ciclo de 8.
—Debe ser un 7+7, la abertura del 14 hacia un 21.
—No se dio cuenta, pero todo se arreglaría con un te quiero, sin
necesidad de dar nada más.
—Esto no es orgullo, ya que siempre soportamos muchas cosas.
—Daríamos todo y sentiríamos que vale la pena.
—Podríamos ver y dar el romance que siempre quisieron.
—Pero cometiste el error de pensar que podían saber lo que hacían. Fueron
ignorantes de todo esto.
—Así es, pero ya te pedí perdón y lo
siento..
—Espero que hayas aprendido la lección.
—Si lo he hecho, gracias y hasta pronto.
—Hasta pronto, estaré en ti.